Con motivo de la crisis generada por la pandemia, el Patronato de la Universidad del Pacífico inició una reflexión sobre cómo ello estaba impactando en alumnos de la Universidad del Pacífico y si podría afectar la continuidad de sus estudios. Para esto convocó a los miembros de su Consejo Directivo a contemplar la posibilidad de apoyar a los alumnos asumiendo el costo de sus estudios durante un año.
En la discusión se convocó también al rector de la Universidad del Pacífico, Dr. Felipe Portocarrero, quien confirmó que un numeroso grupo de estudiantes se encontraba en graves dificultades económicas e informó que la universidad ya venía apoyándolos con la flexibilización de los pagos y la recategorización a escalas más bajas.
Así, como resultado de este intercambio surgió una posibilidad más concreta de apoyo y el Consejo Directivo decidió iniciar una campaña de emergencia. Para ello sus miembros crearon un Comité de Emergencia encargado de la recaudación de fondos entre sus redes de egresados de la UP y se fijó como meta apoyar a 70 de los 150 estudiantes identificados por las autoridades de la universidad en los que se combinaban la necesidad económica y el buen rendimiento académico, mientras que por otro lado elaboró una relación de más de 100 contactos de exalumnos que eran potenciales donantes. Y de esta manera, el 15 de setiembre se inició la campaña.
Las coordinaciones para la recaudación se iniciaron el 7 de octubre y tuvieron resultados impresionantes, al punto de que solo dos días después ya se contaba con 12 becas. Para el 23 de octubre, cuando se realizó la primera reunión con los donantes, la UP presentó los increíbles resultados hasta ese momento: hasta ese día se había alcanzado un número de 59 donantes y 52 becas.
Desde el Patronato de la Universidad del Pacífico nos sentimos felices con este inmenso logro, que nos ha demostrado el altísimo nivel de solidaridad y empatía que existe en la comunidad UP.
Pero este logro no se quedará allí. El Patronato y la Universidad del Pacífico tienen un proyecto conjunto que es más ambicioso aún y que consiste en crear un fideicomiso o “endowment”, que permita apoyar en un futuro próximo a una mayor cantidad de alumnos de una manera permanente.